El misterio del patrimonio de Manuela Carmena
29-12-15.-
El pasado día 2 el Ayuntamiento de Madrid hizo pública la declaración de bienes de todos sus concejales (se puede consultar aquí). Desde el primer momento, la declaración de la Alcaldesa Carmena causó sorpresa. En efecto, Dña. Manuela declaraba ser propietaria de un chalé y de una finca en Segovia, cuando distintas informaciones ya habían establecido que, en realidad, tenía un chalé, más el tercio de un chalé contiguo y que, además, en Segovia, tenía dos fincas y no sólo una.
La reacción inicial del Ayuntamiento fue confusa. Primero dijeron que la alcaldesa se había "olvidado" de incluir esos bienes (igual que varios concejales de Ahora Madrid olvidaron que tenían una cuenta corriente). Luego rectificaron y afirmaron que la alcaldesa había incluido el valor catastral de dichos bienes no declarados en los bienes que sí había declarado. A partir de entonces, se sucedieron informaciones sorprendentes sobre el patrimonio de la alcaldesa de Madrid, lo que llevó al Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento a pedir su comparecencia el pasado 22 de diciembre.
A continuación resumo las tres zonas de dudas del patrimonio de Carmena. Estas se refieren a:
La compra de un tercio de la casa de su vecina, Dña. Cristina Almeida, en 2003.
La disolución de la sociedad de gananciales con su marido en 2010.
El pago de su hipoteca en 2015.
En cada caso establezco los hechos y, a continuación planteo las preguntas a las que aún no ha respondido la alcaldesa.
La casa de Cristina Almeida
En 2003, la Sra. Carmena acordó comprar un tercio del chalé de Cristina Almeida contiguo al suyo. El precio acordado fue de 180.000 euros. El pago se hizo en tres plazos de 60.000 entre 2003 y 2004. Dos de estos pagos, por valor de 120.000 euros, se hicieron en metálico.
Esto lleva uno a preguntarse:
¿Por qué hizo Dña. Manuela estos pagos en metálico? ¿Por qué no hizo una transferencia?
Por otro lado, ¿de dónde salió el dinero? La Sra. Carmena, en esos años, ganaba como juez unos 50.000 euros netos al año. Los 120.000 aludidos son dos años y medio de su salario anual. Estamos, pues, hablando de mucho dinero relativo a su salario.
En caso de haber sacado estos fondos de una cuenta bancaria, ¿tendría los recibos que así lo acreditasen?
El segundo de estos pagos en metálico se hizo el sábado 13 de marzo de 2004. Es un día llamativo, dos días después de los atentados del 11-M y uno antes de las elecciones generales. ¿Por qué eligió justo esa fecha para realizar el pago?
En su respuesta el 22 de diciembre, la alcaldesa quiso diferenciar un pago "en metálico" de uno "en efectivo". Es cierto que "en efectivo" incluye el metálico, además de cheques o tarjetas de crédito. Pero lo cierto es que el Registro de la Propiedad establece que ella pagó "en metálico". No se entiende, pues, que dijese que pagó con un cheque el segundo de los pagos. Del tercero de los pagos, hecho el 13 de marzo de 2014, no dijo nada.
Por otro lado, Carmena tardó 5 años –hasta 2009– en escriturar la compra. ¿Por qué tardó tanto tiempo en hacerlo? ¿Tendrá algo que ver con la prescripción de una presunta irregularidad fiscal? Además, hay varias contradicciones entre las escasas aclaraciones hechas por el Ayuntamiento y lo contenido en los documentos oficiales.
Su famosa Página de la Verdad (su Pravda 2.0) afirma que la alcaldesa "compró el derecho de uso pero no la propiedad" del tercio de la vivienda de la Sra. Almeida. Sin embargo, la escritura publicada en la misma entrada establece que la Sra. Almeida le vendió "el pleno dominio de una tercera parte indivisa de la finca". Es decir, la misma página dice una cosa y su contrario. ¿En qué quedamos?
Además, la propia alcaldesa afirmó que el valor catastral de ese tercio estaba incluido en su declaración de bienes. Es evidente, pues, que es la propietaria de este tercio. Entonces, ¿por qué dicen lo contrario? Y, en este sentido, ¿quién paga el IBI de ese tercio? Dice el Ayuntamiento que lo paga la Sra. Almeida, pero el pago le correspondería a la alcaldesa. ¿Por qué no lo paga Carmena?
Finalmente, Carmena debería demostrar que obtuvo todas las licencias y autorizaciones urbanísticas necesarias para unir su chalé al de su vecina. Sigue...